Acaso aún más bella que la propia Palermo, el viajero que la conozca no podrá evitar sucumbir a sus encantos. Fundada por griegos (...
Acaso aún más bella que la propia Palermo, el viajero que la conozca no podrá evitar sucumbir a sus encantos. Fundada por griegos (...
Acaso aún más bella que la propia Palermo, el viajero que la conozca no podrá evitar sucumbir a sus encantos. Fundada por griegos (...
Acaso aún más bella que la propia Palermo, el viajero que la conozca no podrá evitar sucumbir a sus encantos. Fundada por griegos (...
Acaso aún más bella que la propia Palermo, el viajero que la conozca no podrá evitar sucumbir a sus encantos. Fundada por griegos (...
Acaso aún más bella que la propia Palermo, el viajero que la conozca no podrá evitar sucumbir a sus encantos. Fundada por griegos (...
Acaso aún más bella que la propia Palermo, el viajero que la conozca no podrá evitar sucumbir a sus encantos. Fundada por griegos (...
Acaso aún más bella que la propia Palermo, el viajero que la conozca no podrá evitar sucumbir a sus encantos. Fundada por griegos (...
Acaso aún más bella que la propia Palermo, el viajero que la conozca no podrá evitar sucumbir a sus encantos. Fundada por griegos (...
Acaso aún más bella que la propia Palermo, el viajero que la conozca no podrá evitar sucumbir a sus encantos. Fundada por griegos (...
Acaso aún más bella que la propia Palermo, el viajero que la conozca no podrá evitar sucumbir a sus encantos. Fundada por griegos (o tal vez fenicios) en torno al siglo VIII a. C. como punto avanzado que protegiera sus dos grandes puertos naturales. Su estructura es la de una gran península rocosa unida a tierra firme por unos pequeños puentes. De este pasado antiguo aún quedan restos majestuosos, como las ruinas del templo de Apolo, casi nada más cruzar el puente. También podemos encontrar un lugar casi mítico de la antigüedad, la Fuente Aretusa, colmada de los típicos papiros que hicieron famoso el lugar. Un rincón en donde transcurrieron los amores entre la Ninfa Aretusa y el dios del río Alfeo. Sin embargo, el plato fuerte será encontrarnos un templo griego perfectamente conservado ¡dentro de su duomo! (AQUÍ PODÉIS VER UNA RUTA POR LOS TEMPLOS GRIEGOS DE LA ISLA) Al exterior nos muestra su fachada barroca. Una más del maravilloso catálogo que forma esta piazza en forma de lágrima. Enfrente encontraréis el Palazzo de Benevento Y al fondo la iglesia de Santa Lucía, la patrona de la ciudad que cada diciembre sale a sus calles (su magnífica escultura de plata) entre ruido de pólvora y música. En la misma iglesia se encuentra uno de los últimos cuadros de Caravaggio, recientemente restaurado: El Martirio de Santa Lucía. Pero los encantos de Ortigia no terminan aquí, y el viajero no podrá marcharse de ella sin pasearla sin rumbo, perdiéndose por sus callejuelas enmarañadas que, sin aviso previo, nos conducirán al mar. En ella descubriremos esa dualidad meridional de un pasado glorioso (no os perdáis la exuberancia de sus balconadas) y una actualidad mucho más popular en donde lo sublime y lo terrible se dan la mano en un contraste fascinante que os dejará embrujados tanto en el día como en la noche. TODAS NUESTRAS RUTAS POR SICILIA