"Los pequeños ferrocarriles también tienen su historia, producto de una ilusión, de una realidad, de un progreso y, en algunos casos, de una decadencia y abandono" Rafael Ruiz Sanchidrián Una pequeña línea rural de ferrocarril puede ser vista como un conjunto de vías, máquinas, estaciones, vagones pero también puede imaginarse como un universo que convierte varios pueblos en una comunidad lineal, porque el tren lleva noticias, desencadena historias, unifica el tiempo, marca las horas, y en definitiva, abre los pueblos que toca a un nuevo marco de convivencia Su origen En el último tercio del SXIX fue un periodo de cierta prosperidad para la comarca de Borja. Este auge económico fue debido principalmente al aumento de la demanda y de los precios de los vinos, lo que originó un incremento de las plantaciones de viñedos. Esta prosperidad económica también se vio apoyada por una gran demanda en la producción de cereales, olivo, legumbres, lino, cáñamo y frutas Por aquel entonces ocurría que el transporte tanto de mercancías como de viajeros resultaba excesivamente caro, lento e incómodo y conllevaba a una depreciación de los productos de la comarca, por todo ello y otras causas se llegó al convencimiento de la necesidad de establecer una línea de ferrocarril que solventara en parte la movilidad de las personas y el transporte de los productos generados en la comarca Previo a la Inauguración Tras la convicción de que esta línea de ferrocarril sería rentable, se formaliza la Compañía del Ferrocarril Económico de Cortes, llevándose a cabo la construcción de un ferrocarril de carácter económico y no subvencionado por el Estado Durante el proyecto de construcción se plantearon diversos itinerarios posibles, estableciéndose finalmente el de mayor facilidad constructiva y de mayor accesibilidad a las estaciones por parte de las localidades Longitud final del trayecto 17 Km y 543,75 m y ancho de vía estrecha Previa a su inauguración de la línea su concesión se ve afectada por varias transferencias, una de ellas fue la realizada a don Juan Alonso Fuldain, rico capitalista quedando entonces inscrita la línea de ferrocarril a nombre de la Sociedad Altos Hornos y Fábrica de Hierro y Acero de Bilbao. Sin embargo, pocos días después fallece este cerca de Mallén mientras inspeccionaba los trabajos realizados del ferrocarril. Su viuda Ezequiela de Alzaga cede los poderes de la línea a Rafael Alonso, hermano del fallecido Inauguración 27 de Mayo de 1889 El día de la inauguración a partir de las 04:00 h, de la mañana comenzaban a llegar a la estación del Arrabal las máximas autoridades religiosas, militares y civiles. Entre estas destacamos la figura de Ricardo Diaz secretario del Gobierno Civil, tres diputados provinciales, una comisión del Ayuntamiento de Zaragoza, otra de la Cámara de Comercio de Zaragoza, de otros invitados ilustres y la prensa En esta estación zaragozana del Arrabal fueron recibidos por Rafael Alonso, presidente de la compañía del ferrocarril de Cortes a Borja, por el nuevo ingeniero jefe del ferrocarril, por el diputado provincial Alfredo Ojeda y por una comisión municipal borjana A las 07:30 h. salía de Cortes el tren inaugural con 6 coches excesivamente adornados con guirnaldas, escudos, banderas nacionales y crespones negros en señal de duelo con la muerte de Juan Alonso "La llegada a los distintos pueblos del recorrido se producía entre la alegría desenfrenada de la población, la cual, en medio de un gran júbilo, se había lanzado a la calle en masa, conscientes de que el abanderado del progreso pasaba por sus pueblos. En cada localidad se incorporaba a la comitiva una presentación municipal" Alfonso Marco, 1998 Mallén localidad que por aquel entonces contaba con una amplia población se mantuvo al margen de tales muestras de júbilo y entusiasmo. La compañía en sus inicios dejó al pueblo muy lejos de la línea, y este fue el motivo por el cual los ciudadanos y representantes se sintieron ofendidos por considerar que se quedaban apartados del progreso En Borja llegaba el convoy hacia las 09:00 h. La llegada fue un verdadero delirio imposible de describir. Miles de almas, azoteas llenas de señoras, andenes repletos, también arcos de follaje. Todo ocupado por un pueblo frenético Diario de Noticias de Zaragoza, 28 de mayo de 1889 Tras la misa celebrada en la colegiata y la ceremonia de bendición del nuevo tren e inauguración de la línea en nombre del rey la comitiva se dirige al Ayuntamiento en donde es servido el tradicional banquete oficial, el cual se componía de alcachofas, jamón, anguila, merluza, licores, pastas, dulces, helados, champán, tabacos... "Borja está ya unida al movimiento progresivo y civilizador de las grandes ciudades por dos líneas de acero, indomable como su voluntad, brillante como sus timbres y símbolo del progreso como su actividad y sus fuerzas" Rafael de Castro, 27 de mayo de 1889 Línea Cortes-Borja La compañía del ferrocarril de Cortes-Borja en los primeros años de explotación de la línea tomó la decisión de hacer las cosas de forma adecuada, para ello compró un material polivalente, robusto y de buena calidad, y llegó incluso a adquirir unos coches de viajeros con una cierta comodidad superior a los de otras compañías recientemente inauguradas Inicialmente la compañía realiza la adquisición de dos locomotoras tipo tanque bautizadas con el nombre "Aragón" y "Vizcaya". En 1896 se incorporó una nueva locomotora que fue conocida como "Borja", "La Borjana", "La Chata". Estas locomotoras consumían un promedio de 130-150 kilos de carbón por trayecto y nunca rebasó de 30Km/h. Eran capaces de remolcar tanto vagones de viajeros como vagones con cargas bastante pesadas Durante los años 20 y 30 las empresas ferroviarias en su afán por competir con el transporte de carretera desarrollan los nuevos modelos de tren que consiguen mejores resultados a costes inferiores En los años 40 la compañía del ferrocarril de Cortes-Borja después de fallidos intentos por mejorar la línea, decide incorporar dos automotores, estos vehículos eran más potentes, veloces, baratos y se adecuaban mejor a los distintos perfiles y trayectos Las ciudades que fueron provistas de estaciones o apeaderos fueron Borja, Ainzón, Albeta, Bureta, Magallón, Bisimbre, Agón, Fréscano, Cortes y posteriormente a la inauguración de la línea se estableció un apeadero en Mallén Resulta interesante conocer la distribución del personal que se ocupaba de la línea ferroviaria. Durante el periodo de 1897-1917 la línea de ferrocarril Cortes-Borja contaba con la siguiente plantilla "Jefes de Estación, Factores, Guardagujas, Interventor en Ruta, Guardafrenos, Maquinista, Fogonero, Jefe de Taller, Operarios, Capataz, Obreros, Jefe Administrativo, Auxiliar Administrativo, Escribiente, Médico, Practicante, Guardesas" Las guardesas eran las esposas de los obreros y capataces de vías y obras cuyo salario era inferior al del hombre por considerarse su trabajo como un complemento familiar La línea Cortes-Borja vivió momentos duros desde el inicio en 1889 hasta su clausura en 1955 Este ferrocarril todavía es citado en la comarca de Borja cuando se quiere dar idea de la lentitud de algo o alguien "más lento que el tren de Borja" A la salida de Ainzón en dirección Cortes dada la velocidad con la que circulaba el ferrocarril los viajeros podían disfrutar de un hermoso camino rodeado por olivos, árboles frutales y huertos Cese del Borjica Finalmente ante la imposibilidad financiera para modernizar la línea junto con el progresivo desgaste del material rodante y de las instalaciones, derivó a un estado precario y ruinoso de la línea de ferrocarril Cortes-Borja conllevándolo a su más fatídico final Muchos fueron los esfuerzos por parte de las autoridades de la comarca, Instituciones, Sindicato de Labradores y de Riegos, alcaldes, ciudadanos y empresarios por mantener la línea en funcionamiento. Sin embargo en el año 1955 llegó definitivamente la suspensión del servicio de la línea Cortes-Borja por la Dirección General de Ferrocarriles motivada por las malas condiciones en que se daba al servicio y por razones de seguridad para los viajeros Años más tarde y tras varios intentos de recuperar el antiguo ferrocarril, su fin termina como un mero recuerdo vivido por nuestros padres y abuelos de lo que en un tiempo fue para la Comarca del Campo de Borja Referencia Bibliográfica El ferrocarril de Cortes a Borja. Ilusión, realidad y progreso. Alfonso Marco, 1999 El historiador Alfonso Marco es uno de los autores del interesante blog Viajes Ferroviarios de Ayer, Hoy y Mañana en donde encontraréis interesantes publicaciones sobre esta temática