El Camino de Santiago crece en términos de popularidad y por tanto debemos conocer los detalles que nos ayudarán a aprovechar al máximo esta experiencia. Son muchos cuyas razones son religiosas y otros tantos ociosas, sin embargo, todos los caminantes tienen algo en común: cada uno carga con sus problemas o con su cruz: la mochila. Preparar la mochila es importante ya que será nuestra compañera en cada kilómetro, debemos tener en cuenta aspectos como el peso, el tamaño, el orden y la predisposición que tengamos a cargar con ella. – Peso La mochila no debe pesar más del 10% de nuestro peso, por ejemplo, si pesamos 60 kilos, la mochila no excederá los 5,4 kilos. – Tamaño El tamaño dependerá de la estación en la que nos encontremos, en invierno la capacidad rondará los 40-50 litros ya que los forros polares y sudaderas ocupan más espacio. En verano, con una mochila de 25-30 litros iremos cómodos y no sufriremos de sobrecarga.– Orden En cuanto al orden, los objetos más pesados irán al fondo mientras que los más ligeros ocuparán los últimos huecos. Por ejemplo, si llevamos saco de dormir, este se meterá lo primero. Respecto al saco, en la mayoría de los albergues ofrecen sábana bajera y manta, y por un euro o dos puedes pedir una sábana extra; por tanto, el saco de dormir no siempre es necesario y prescindir de él libera mucho espacio. – Predisposición a llevarla El Camino de Santiago cada vez genera más servicios, entre ellos el transporte de mochilas de un albergue a otro. Es una opción cómoda ya que tan solo cargarás con lo esencial: agua, teléfono móvil, dinero y algo para comer. Varias empresas que se dedican a ello son sinmochilas.es, Correos, Jacotrans y Tonitransporte.– Contenido Una vez analizados estos aspectos llegamos al ... Seguir leyendo