Todos hemos realizado al menos un objeto hecho a mano en la infancia. Parece que los protagonistas de nuestra selección de hoy quedaron tan entusiasmados con esta experiencia que decidieron no detenerse en la adultez. Así nació un brasero hecho con una computadora, un pez de sandía y un bate desatascador. Y aunque la mayoría de estas cosas no se vean muy bonitas, sus creadores pueden decir con orgullo: “lo hice yo mismo”.